El arte no se enseña, se hace vivencia y experienciación humana total. Ahora bien, ante una concepción y práctica perversa del arte, donde se dibuja y completa una obra con colores de madera, colores hechos a partir de destruir bosques; surge contrario a esto, la alternativa de sembrar jardines para pintar, salvar selvas y espacios boscosos haciendo arte con pigmentos vegetales y minerales.